viernes, 27 de agosto de 2010
La gota que derramo el vaso
No se trata de un análisis sino de una reflexión profunda, lo que esta pasando en la USAC es la gota que derramo el vaso y duele tanto ver que no se encuentra un dialogo entre autoridades y estudiantado para salir de esta crisis.
Reflexionando de lo importante de la Universidad de San Carlos en la sociedad me doy cuenta también que la corrupción ha permeado hasta las entrañas a esta casa de estudios superiores.
Ya quisiéramos ver y construir una San Carlos como la UNAM de México, considerada una de las mejores universidades a nivel mundial y que también tuvo una crisis institucional hace pocos años, y que pasaron 8 meses para que entablaran dialogo tanto autoridades como estudiantes.
La crisis actual en la USAC puede y debe ser una oportunidad para rescatarla de las garras de la corrupción, y sobre todo de la falta de ética tanto a nivel estudiantil como de autoridades.
Todos los grupos de poder han prostituido a la San Carlos, desde políticos hasta las asociaciones de estudiantes; y los que estudiamos en la U solo vimos como espectadores todo el entramado politiquero siendo coparticipes por omisión.
Por eso duele tanto…, por aquellos recuerdos en la plaza de los Mártires con mi cigarro en la boca y viendo la luna llena redondear el costado de las ceibas, formando un camino tenue de luz y sombra, por eso duele tanto que nadie haga ni proponga nada para cambiar la situación. Por eso duele tanto que entre bebidas alcohólicas se quiera arreglar el mundo sin dar siquiera sobriamente el primer pasó para cambiar desde uno mismo.
Por eso me duele tanto porque yo por omisión y cobardía contribuí también a que esta gota se derramara del vaso y es por eso que no quiero reclamar nada más que a mí mismo, para construir desde mí ser un mundo distinto..., una sociedad distinta sin ideologías recalcitrantes tanto de derechas como de izquierdas, y trabajar día a día en SER un profesional en plenitud, una persona en plenitud.
viernes, 6 de agosto de 2010
“Brazas bajo las cenizas”
El título hace alusión a un libro de Leonardo Boff y es que la situación guatemalteca a casi 14 años de la firma de la paz, recrudece día a día y parece que las brazas se mantienen arraigadas en cada situación constante de corrupción, impunidad, extrema pobreza, exclusión social, esto sumado a índices de violencia alarmantes.
Andrés Cabanas en su revista hace un análisis que denomina La Encrucijada de Guatemala: regresión autoritaria o democracia participativa dice: “Se producen casi 6.mil asesinatos cada año. La tasa de homicidios por cien mil habitantes es de 43,3, la segunda más alta en Centroamérica después de El Salvador y Honduras (48,7 y 40,1, respectivamente). Asombra que la violencia, en vez de disminuir, se haya incrementado después de la firma de los Acuerdos de Paz: en 1996, el promedio de asesinatos diarios fue de 9,91, en el 2006 ascendió a 16,12 y en el 2007 a 15,83”.
La situación del país se deteriora constantemente y la impunidad campea como el viento es por ello que se instala en Guatemala la Comisión Internacional Contra la Impunidad (CICIG) en septiembre de 2007, única entidad a nivel mundial que se sitúa en un país para combatir la impunidad conjuntamente con las instituciones de justicia.
No es sorpresa que distintos sectores se opusieran a CICIG en nuestro país aludiendo que violaba la soberanía nacional, en cambio la comisión ha demostrado que ha develado algunos casos paradigmáticos, pero falta mucho por hacer, luego de la renuncia del doctor Carlos Castresana, en agosto próximo tomará posesión un nuevo comisionado, como lo describió un matutino “El fiscal de hierro”, al doctor Francisco Dall´Anesse.
La carta de bienvenida para Dall´Anesse es que: “solo un 1% de los crímenes cometidos llega a juicio y condena, el 2% es desjudicializado y el 97% queda en la impunidad, lo que favorece y alienta la comisión de nuevos crímenes”, (Cabanas Andrés, La Paz Incompleta).
Las llagas que arrastra el país: La desigualdad
Para nadie con mente clara es sorpresa que Guatemala sea uno de los países a nivel mundial con mayor índice de desigualdad, el status quo se mantiene constantemente y las decisiones para refundar el Estado guatemalteco solo se quedan en papeles. Y es que no es sorpresivo también que tengamos a unas de las oligarquías más primitivas como bien dijera Noam Chomsky.
Esas llagas de desigualdad se intentaron sanar en la Revolución de 1944, pero de plano no conveniente a los intereses geopolíticos de EE.UU y la oligarquía guatemalteca, fue destrozada y denigrada; luego se intento el cambio por la vía de las armas, sin embargo la guerra denominada de baja intensidad paso a un papel de guerra sucia, donde fueron asesinados, torturados y desaparecidos aproximadamente 250 mil personas (Comisión del Esclarecimiento Histórico), muchos de ellos en masacrados en distintos puntos del país.
Hablar sobre desigualdad en Guatemala significa recorrer todas aquellas llagas que ha dejado marcada al historia hiriente de nuestro pueblo y donde la desigualdad esta a la orden del día.
Según el informe Regional sobre Desarrollo Humano para América Latina y el Caribe 2010, Guatemala tiene un índice de desigualdad de (55) tan solo superando a países como Botsuana, Etiopía y Nepal.
El fenómeno de la desigualdad en Latinoamérica es complejo, pero obedece en buena parte a una “herencia generacional” y al mal diseño de políticas públicas, que en la mayoría de los casos se han limitado al combate a la pobreza, dijo Isidro Solaga, coordinador del informe.
Para Solaga, “el sistema político de la región refuerza la reproducción de la desigualdad”, pues en la mayoría de los países, por ejemplo, los sistemas fiscales son “asimétricos”, es decir, con una fuerte carga en el consumo, en lugar de gravar el ingreso”
La mujer: el motor de la sociedad
La mujer desempeña un papel fundamental dentro de la sociedad, pero ojo, no el que por años, mejor diría por siglos se ha mantenido, que la mujer es solo para la casa y para tener hijos.
El nuevo patriarcado consiste en pensar que el hombre es mejor que la mujer a nivel laboral. Y la realidad muestra todo lo contrario la mujer es menos corruptible que el hombre y en muchas ocasiones trabaja más, también vemos que la mayoría que han jodido… y muy bien al país en su mayoría son hombres.
La mujer indígena y mestiza ha quedado en segundo plano en nuestra sociedad patriarcal. Y bien lo dice Paula del Cid del movimiento feminista, la situación empeora, y es necesario que se fortalezca a la mujer en todo tipo de planos (económico, social, cultural, etc) y que se lleven a cabo proyectos de desarrollo en pro de un cambio profundo en nuestra sociedad.
Para mencionar de nuevo el informe Regional sobre Desarrollo Humano para América Latina y el Caribe añade un punto fundamental y es que muestra un elemento común en toda Latinoamérica y es que las mayores víctimas de la desigualdad son las mujeres, así como los indígenas y afro descendientes.
Un fenómeno recurrente: El feminicidio
La sociedad donde vivimos los guatemaltecos ha tocado fondo, se habla ya de un Estado Fallido, por otro lado también los medios de comunicación masivos, nos presentan escenas dantescas, como las personas descuartizadas que aparecen periódica y sistemáticamente en el país.
El punto fundamental es que muchos de los casos son contra mujeres, no es que a los hombres no les ocurra todo aquello, pero los índices de muerte hacia las mujeres se incrementan día a día.
Cabanas en su revista de análisis subraya que la aprobación de la Ley contra el Femicidio y otras Formas de Violencia, Decreto 22/2008, constituye otro ejemplo de capacidad de modificar políticas públicas, a partir del trabajo conjunto, del esfuerzo intersectorial y de la vinculación de luchas sociales y luchas institucionales.
El analista añade que La ley visibiliza la violencia contra las mujeres como una problemática social estructural, visibilización demandada por el movimiento de mujeres, y tipifica como delitos los asesinatos, la violencia sexual, la violencia psicológica y la violencia económica, entre otros. Se reconoce con ello una realidad: las agresiones contra las mujeres van más allá de las cifras oficiales de violencia intrafamiliar y constituyen un fenómeno que permanece invisibilizado.
La ley puede contribuir a la erradicación de las muertes violentas y prevenir la violencia, aunque será de difícil cumplimiento por la inadaptación y falta de sensibilidad de los operadores de justicia y de impacto limitado por los vacíos que presenta: no tipifica el acoso y hostigamiento sexual, tampoco la violencia institucional y política, ni considera el endurecimiento de sanciones cuando se trate de víctimas con capacidades diferentes o población indígena. recalcó Cabanas.
La extrema violencia con que se produce, a diferencia de los asesinatos de hombres. Al menos un 35% de casos de asesinatos de mujeres fue precedido de torturas y un 45% de violación sexual. La extrema violencia revela la misoginia y el desprecio a las mujeres. Lo anterior deja un mensaje implícito en los asesinatos: el retorno al hogar, en un marco de agresión y falta de garantías para el pleno desarrollo de las mujeres en el espacio público. Concluyó el analista.
“La mejor forma de decir es hacer”
Para construir proyectos de desarrollo es primordial que las experiencias realizadas en distintos programas se pongan sobre la mesa, así es como diplomados sobre formulación de proyectos no solo son necesarios sino de gran importancia.
En Guatemala es posible el cambio. Distintos proyectos han generado cambios paulatinamente, han trazado el camino a largo plazo para que la sociedad guatemalteca logre no solo una transformación comunitaria, sino también política y social.
En la identificación los expertos nos han aclarado que el papel científico en la formulación de proyectos es clave y sobre todo la pertinencia cultural del lugar donde se desarrollan los proyectos.
Hasta hoy la experiencia del diplomado ha sido valiosa en análisis y propuestas. La exposición de Paula del Cid y los materiales sobre el papel de la mujer en la sociedad, me hicieron tomar conciencia de un tema relegado en la sociedad, la importancia de las mujeres para la transformación del país.
El ciclo de formular un proyecto es complicado, empero vale la pena el trabajo por el bien de la búsqueda de la transformación constante. Y como diría el maestro Ernesto Guevara “El Che” no vale tanto lo que se diga sino en el hacer cotidiano, para que un día las brazas bajo las cenizas se apaguen y empiecen a crecer los crisoles de una Guatemala distinta.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)